Navegamos. Pese a los pronósticos de mal tiempo, pese a que nos levantamos tarde, y pese a que tuvimos que esperar a Elena y a Cori. Jmmmm. Pasamos super bien, nos bañamos cerca de la Isla de las Gaviotas después que pasó un cambio de marea. Nos bañamos nosotras, porque Rafa y Juan y Julio se quedaron en el barco. A Juan le daba frío, a Rafa no sé, y Ju sé que no quería dejar el barco solo con los pronósticos de vientos fuertes. Y la tormenta se veía ahí nomás. Había terrible corriente, si no nos agarrábamos al cabo que Ju soltó a popa, en dos segundos íbamos a parar a la Playa del Buceo. Apenas subimos al barco levaron el ancla y volvimos al puerto. En cuanto terminaron de amarrar el barco se largó el viento. Se volaba todo, las sombrillas de la piscina del club, ramas de palmeras, gatos, ratas, pájaros, papeles, bolsas de nylon. Elena, Juan y Rafa bajaron a tierra y Cori y yo dormimos una buena siesta hamacadas por el Sur. Julio hizo de vigía.

Etiquetas: marzo

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