Un poco mejor, pero seguí a régimen. Arroz y queso y compota de manzana y antiespasmódico amargo amargo amargo amargo amargo amargo.

Fuimos a caminar, a dar una vuelta por el Parque, no quisimos ir a la Rambla porque el viento estaba helado. Paseando, encontré una casa con un adorno de bronce muy simbólico, con una parte con la réplica de una armadura medioeval, un escudo con un águila y otros relieves.

En la parte de los juegos del Parque, vi dibujos muy extraños, un muñeco policía con cara maligna y rasgos parecidos a los de Chucky, el muñeco, aunque más viejo, pero con sus características. No creo que nada de eso pueda haber sido hecho por algún ser humano, seguro que todos son signos helumanos. Un gusano tomando mate, un elefante retozando entre flores. Unos hombres hablando entre ellos algo que nadie entiende (todo metalenguaje simbólico, offfcors). También un hombre muy raro se nos acercó y nos ofreció un barco de madera por $ 50. Y siguió su camino con rapidez. Y... el indicio más sospechoso; un edificio que se llama Torre Patria con la inequívoca forma de una heladera gigante...

Etiquetas: abril

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